Emisiones de gas y ruido procedentes de la industria que se lanzan al medio ambiente, están sujetas a normativas para controlar y mitigar su volumen e impacto.

Todas las industrias que desarrollan en sus plantas de producción procesos químicos, deben controlar sus emisiones antes de emanarlas al exterior. Diferentes procesos industriales descargan en el aire, contaminantes como monóxido de carbono, óxidos de azufre, hidrocarburos, óxidos de nitrógeno y material en partículas (polvo, ceniza).

El compromiso de la industria con el medio ambiente y en el marco que impone la legislación vigente del Ministerio del Ambiente, obligan a que el monitoreo y verificación del cumplimiento de las normas, se convierta en un tema de crucial importancia en la gestión de cualquier empresa de este sector.

El país cuenta con una amplia gama de laboratorios acreditados en las tres regiones, con competencia para realizar pruebas de emisiones gaseosas de fuentes fijas de combustión para la industria química/petroquímica, hornos industriales de combustible sólido, gas, líquido, plantas de turbinas de gas, centrales eléctricas, incineración de desechos, producción de cemento, cerámica, ladrillos, hierro, acero crudo, aluminio, refinerías, entre otras.

Para el control de estas emisiones, por su peligrosidad y toxicidad, se deben aplicar diversos protocolos en la cadena de producción de las industrias. Un correcto análisis de las proporciones de los gases puede dar lugar a diagnósticos muy efectivos en el funcionamiento de la maquinaria y lo más importante, para proteger la salud y seguridad de las personas, que pueden ser afectadas por exposiciones tóxicas o explosivas.

Fecha de publicación: 31 de enero de 2018