Nuevos cambios se preparan para la certificación de sistemas de gestión de energía bajo la norma ISO 50001.

La nueva versión de la norma ISO 50001 para sistemas de gestión de energía se encuentra en revisión y su publicación oficial está prevista para finales del año 2018 o inicios de 2019. Cada vez son más los esfuerzos para que las organizaciones puedan contar con un sistema de gestión integrado, haciendo que las normas ISO sean lo más compatibles posible e impulsando su óptima implementación.

Integrar la ISO 50001 a la estrategia corporativa, es considerar a todo lo relacionado con la organización y las partes interesadas, como parte del proceso de planificación energética, empezando por su ámbito de aplicación, es decir, la empresa debe definir sus oportunidades y riesgos, y poner en práctica las medidas apropiadas para conseguir los resultados previstos en cuanto a la mejora del rendimiento energético.

La revisión hasta el momento da claros indicios de los cambios que va a presentar la nueva versión de esta normativa, como es la responsabilidad que debe asumir la alta dirección de la empresa para asegurar que el Sistema de Gestión de la Energía se ejecute exitosamente, sin lugar a delegación de esta tarea a otra instancia. Es indispensable también contar con un equipo de gestión energética, que puede constar de una solo persona, que deberá supervisar el funcionamiento del sistema e informar de forma regular a la alta dirección sobre su rendimiento.

El objetivo de la revisión y actualización de la norma, es ayudar a que los usuarios comprendan mejor sus requisitos y saber qué datos deben recopilar. La novedad es la estandarización de los datos, pues es necesaria si las variables son relevantes y tienen un efecto muy significativo sobre el rendimiento energético. Los datos sobre energía se modificarán con el fin de permitir una comparativa de rendimiento en condiciones equivalentes, de esta manera el “Plan de medición energética”, requerido hasta ahora en “Control, medición y análisis” pasará a formar parte de la planificación como “Plan de recogida de datos energéticos”.

Además, en la revisión ISO 50001 se precisan algunos de los términos y conceptos utilizados, que en algunas ocasiones, no se interpretaron correctamente. Por ejemplo, la “evaluación energética” ahora es mucho más clara, la expresión “información documentada” sustituye a la que se utilizaba hasta ahora como “Documentos” y “Registros”, además se explica con mayor nivel de detalle las definiciones de los indicadores de rendimiento energético y la línea de base energética.

Fecha de publicación: 17 de mayo 2018